BISEL GIRATORIO Y HUSO HORARIO ADICIONAL
El bisel giratorio permite, además, visualizar la hora de un huso horario adicional: para ello basta con hacer girar el bisel sobre sí mismo. En este caso, la hora de referencia ya no está disponible, ya que la aguja 24 horas sirve ahora para la lectura de la hora de ese nuevo huso horario sobre la graduación del bisel.
Para que el bisel pueda cumplir su función de manera óptima, Rolex ha desarrollado un sistema de rotación dotado de un fleje que permite pasar limpiamente de una de las 24 posiciones horarias a otra, en ambos sentidos. Gracias a las muescas de su contorno, que ofrecen un excelente agarre, el bisel puede manipularse cómodamente.
BISEL CON DISCO CERACHROM
El bisel giratorio bidireccional del GMT‑Master II está provisto de un disco Cerachrom graduado 24 horas bicolor. Patentado por Rolex, este disco está fabricado con una cerámica particularmente dura y resistente a la corrosión; es prácticamente imposible de rayar y sus colores no se ven alterados por los efectos de los rayos UV. Los números y las graduaciones, moldeados en hueco, son sometidos a un depósito de una capa de oro o platino mediante una técnica PVD (Physical Vapour Deposition, deposición física de vapor). Más allá de sus funcionalidades y cualidades técnicas, el bisel del GMT‑Master II contribuye plenamente a la fortísima identidad del reloj.
En 2013, Rolex desempeñó un papel pionero al presentar su primer disco de bisel bicolor —azul y negro— de cerámica de un monobloque en una modalidad en acero Oystersteel del GMT‑Master II. Un año después, la marca presentó el disco de bisel bicolor de cerámica roja y azul, en un GMT‑Master II en oro blanco de 18 quilates. La última innovación de Rolex, el disco de bisel bicolor de cerámica marrón y negra, fue presentada en 2018 en dos modalidades del GMT‑Master II, la primera en oro Everose de 18 quilates y la segunda en versión Rolesor Everose (combinación de acero Oystersteel y oro Everose de 18 quilates). Estos discos Cerachrom aúnan el excepcional rendimiento de la cerámica de alta tecnología con la icónica estética del modelo GMT‑Master original.
EL GMT-MASTER II, CRONÓMETRO SUPERLATIVO
Como todos los relojes Rolex, el GMT‑Master II posee un certificado de Cronómetro Superlativo. Esta denominación exclusiva atestigua que cada reloj que sale de los talleres de la marca ha superado con éxito una serie de pruebas llevadas a cabo por Rolex en sus laboratorios internos y con arreglo a sus propios criterios, más exigentes que las normas relojeras. Estas pruebas de certificación se efectúan al conjunto del reloj con el fin de garantizar su rendimiento superlativo en la muñeca. El estatus de Cronómetro Superlativo se simboliza mediante el sello verde que incluyen todos los relojes Rolex y que va acompañado de una garantía internacional de cinco años.
La precisión de cada movimiento —con certificado oficial de Cronómetro emitido por el COSC (Control Oficial Suizo de Cronómetros)— se pone a prueba de nuevo tras el encajado para satisfacer criterios mucho más estrictos que los de la certificación oficial. Así, la tolerancia de marcha media de un Cronómetro Superlativo Rolex es del orden de −2/+2 segundos al día. Además, Rolex pone a prueba esta precisión mediante una metodología exclusiva que simula las condiciones reales de uso, más representativas de la experiencia cotidiana del cliente.
Esta cadena de pruebas de certificación de Cronómetro Superlativo, efectuada gracias a un equipo de alta tecnología especialmente desarrollado por Rolex, está completamente automatizada y permite controlar además la hermeticidad, la cuerda automática y la reserva de marcha de la totalidad de los relojes Rolex. Estos controles tras el encajado completan sistemáticamente las pruebas de calificación realizadas durante la concepción y fabricación de los relojes, para garantizar su fiabilidad, su robustez y su resistencia a los campos magnéticos y a los golpes.
CAJA OYSTER, SÍMBOLO DE HERMETICIDAD
La caja Oyster del GMT-Master II, que garantiza una hermeticidad de hasta 100 metros, es un ejemplo de robustez y fiabilidad. Su característica carrura está tallada en un bloque macizo de acero Oystersteel particularmente resistente a la corrosión o de oro de 18 quilates. Su fondo bordeado por un fino sistema de acanalado se enrosca herméticamente con ayuda de una herramienta especial que permite que únicamente los relojeros cualificados de Rolex accedan al movimiento. La corona, provista de un sistema de triple hermeticidad Triplock y de protectores tallados en la carrura, se enrosca sólidamente a la caja. El cristal, coronado por la lente Cyclops en la posición de las 3 h para una mejor lectura de la fecha, está realizado en zafiro prácticamente imposible de rayar. Totalmente hermética, la caja del GMT‑Master II protege de forma óptima el movimiento de alta precisión que alberga en su interior.
EL CALIBRE PERPETUAL 3285
El GMT-Master II está equipado con el calibre 3285, un movimiento mecánico de cuerda automática completamente desarrollado y manufacturado por Rolex. La arquitectura y la fabricación de este movimiento, así como las innovaciones de las que se beneficia, le confieren su excelente rendimiento en términos de precisión y fiabilidad.
El oscilador está dotado de un volante de gran tamaño e inercia variable, ajustado de forma altamente precisa con ayuda de tuercas Microstella en oro. Se mantiene firme gracias a un puente transversal, cuya altura es ajustable, que lo fija en una posición muy estable a fin de aumentar la resistencia a los golpes.
El calibre 3285 consta de una versión optimizada de la espiral Parachrom azul, fabricada por Rolex en una aleación paramagnética exclusiva. Además de ser completamente insensible a los campos magnéticos, esta espiral ofrece una gran estabilidad frente a las variaciones de temperatura y es hasta diez veces más precisa que una espiral convencional en caso de golpes. Está provista de una curva final Rolex que garantiza la regularidad de la marcha en todas las posiciones.
El calibre 3285 dispone de un mecanismo de cuerda automática por rotor Perpetual, que garantiza una carga de cuerda continua del muelle de barrilete, proporcionando así una energía constante gracias a los movimientos de la muñeca.
El movimiento del GMT‑Master II, que solo puede ser visto por los relojeros cualificados de Rolex, presenta un acabado extremadamente cuidado, que da muestra de las rigurosas exigencias de la marca en términos de calidad.
MOVIMIENTO DE NUEVA GENERACIÓN
El calibre 3285 es un movimiento de nueva generación completamente desarrollado y manufacturado por Rolex para garantizar un rendimiento superlativo. Este movimiento mecánico de cuerda automática, concentrado de tecnología Rolex a la vanguardia del arte relojero, ofrece mejoras esenciales en materia de precisión, autonomía, resistencia a los golpes y a los campos magnéticos, comodidad de uso y fiabilidad.
El oscilador está montado sobre amortiguadores de golpes Paraflex de alto rendimiento, desarrollados y patentados por Rolex, que ofrecen al movimiento una mayor resistencia a los golpes.
El calibre 3285 cuenta con el escape Chronergy, patentado por Rolex, que combina un alto rendimiento energético con una gran seguridad de funcionamiento. Fabricado en níquel-fósforo, este escape es, además, insensible a los campos magnéticos. Gracias a su rendimiento superior y a la arquitectura de barrilete, la autonomía del calibre 3285 alcanza las 70 horas aproximadamente.
BRAZALETE Y CIERRE: SEGURIDAD Y COMODIDAD
El GMT-Master II está dotado de un brazalete Oyster con eslabones de tres elementos —modalidades en versión Rolesor Everose (combinación de acero Oystersteel y oro Everose de 18 quilates), en oro blanco de 18 quilates o en oro Everose de 18 quilates— o de un brazalete Jubilee con eslabones de cinco elementos para las modalidades en acero Oystersteel.
Estos brazaletes están equipados con un cierre de seguridad Oysterlock, diseñado y patentado por Rolex, que evita cualquier apertura involuntaria. Cuentan además con el cómodo sistema de extensión Easylink, desarrollado por la marca, que permite ajustar fácilmente su longitud en unos 5 mm, para una comodidad óptima en todas las situaciones.
Además, un sistema de fijación invisible ofrece una perfecta continuidad visual entre el brazalete y la caja. Asimismo, en las modalidades en oro de 18 quilates del GMT‑Master II, el brazalete Oyster incluye, en el interior de los eslabones, insertados de cerámica para aumentar su fluidez de uso y su longevidad.